La Casa Blanca reconoció el miércoles el fracaso de la política estadounidense con respecto a Cuba, constatando que el bloqueo a la isla ha resultado ser ineficaz, no corresponde a los intereses nacionales de EEUU y no había contribuido a la “instauración de la democracia” en el país.
“Aunque esta política haya sido dictada por las buenas intenciones, ella ha causado poco efecto, puesto que, hasta el momento presente, todo sigue como en 1961, es decir, los Castro y el Partido Comunista siguen gobernando Cuba”, señaló el comunicado de la Administración estadounidense.
El presidente norteamericano, Barack Obama, anunció oficialmente el miércoles la intención de EEUU de normalizar las relaciones con Cuba, en lo que constituye “el cambio más importante de política de EEUU hacia la isla desde hace más de 50 años”.
Tras la nacionalización de las compañías estadounidenses en Cuba, EEUU decretó en octubre de 1960 un embargo comercial contra La Habana, que sería el más largo bloqueo económico de la historia.
El embargo prohibió la importación por parte de Cuba de todos los productos que contienen elementos de origen estadounidense, incluso a través de países terceros.
El fin del bloqueo, sin embargo, no depende del presidente Barack Obama, sino que ha de ser aprobado por el Congreso, donde una mayoría republicana podría abortar tal medida.
Intercambio de prisioneros
El restablecimiento de relaciones diplomáticas entre los dos países ha ido también acompañado por el anuncio de un intercambio de prisioneros con Cuba.
El presidente cubano, Raúl Castro, recibió el miércoles en La Habana a los tres agentes cubanos liberados por EEUU, señaló la televisión del estado.
Vestido con uniforme militar, el presidente abrazó efusivamente a los tres hombres, que fueron condenados a duras penas por espionaje en 2001.
“Estoy orgulloso de vosotros, por la resistencia de que habéis dado prueba y por el coraje y el ejemplo que esto representa para todos”, declaró ante las cámaras.
La liberación de los tres cubanos fue anunciada de forma simultánea a la de un agente cubano a sueldo de Washington y a la del norteamericano Alan Gross, que llevaba preso desde hace cinco años en Cuba.
Según La Habana, los tres agentes cubanos liberados, junto con otros dos que fueron liberados anteriormente, no llevaron tareas de espionaje, sino que se infiltraron en medios anticastristas de Florida para impedir atentados terroristas contra Cuba.
La decisión de Obama incluirá la restauración de relaciones comerciales y diplomáticas y de los contactos políticos. Obama también dijo que pediría al secretario de Estado, John Kerry, que revise el estatus de Cuba como “país patrocinador del terrorismo”.
Reducir la dependencia de Cuba de Rusia
Existen, sin embargo, motivos ocultos en la reciente decisión de la Administración norteamericana. Uno de ellos es el deseo de EEUU de reducir la dependencia de Cuba de Rusia y la influencia rusa en América Latina, señala Alexei Arbatov, miembro de la Academia de Ciencias de Rusia.
“Por supuesto, Cuba se convertiría en menos dependiente de Rusia. Creo que ésta es una de las razones del cambio de actitud de Washington. Si este proceso continúa, Cuba se haría menos dependiente de Rusia y la influencia de Moscú en Cuba y otros países de América Latina podría reducirse”, dijo Arbatov, citado por RIA Novosti.
Según el académico, el gobierno de EEUU busca convertir a antiguos enemigos en aliados con el fin de aislar a Rusia y a China.
Sin embargo, Cuba debería tener cuidado con respecto a tales iniciativas estadounidenses por mucho que le guste ver levantado el embargo, dijo Arbatov, que cree que las autoridades actuarán para impedir que el flujo de turistas o la presencia de compañías estadounidenses socave su independencia, soberanía y sistema político.
Vestido con uniforme militar, el presidente abrazó efusivamente a los tres hombres, que fueron condenados a duras penas por espionaje en 2001.
“Estoy orgulloso de vosotros, por la resistencia de que habéis dado prueba y por el coraje y el ejemplo que esto representa para todos”, declaró ante las cámaras.
La liberación de los tres cubanos fue anunciada de forma simultánea a la de un agente cubano a sueldo de Washington y a la del norteamericano Alan Gross, que llevaba preso desde hace cinco años en Cuba.
Según La Habana, los tres agentes cubanos liberados, junto con otros dos que fueron liberados anteriormente, no llevaron tareas de espionaje, sino que se infiltraron en medios anticastristas de Florida para impedir atentados terroristas contra Cuba.
La decisión de Obama incluirá la restauración de relaciones comerciales y diplomáticas y de los contactos políticos. Obama también dijo que pediría al secretario de Estado, John Kerry, que revise el estatus de Cuba como “país patrocinador del terrorismo”.
Reducir la dependencia de Cuba de Rusia
Existen, sin embargo, motivos ocultos en la reciente decisión de la Administración norteamericana. Uno de ellos es el deseo de EEUU de reducir la dependencia de Cuba de Rusia y la influencia rusa en América Latina, señala Alexei Arbatov, miembro de la Academia de Ciencias de Rusia.
“Por supuesto, Cuba se convertiría en menos dependiente de Rusia. Creo que ésta es una de las razones del cambio de actitud de Washington. Si este proceso continúa, Cuba se haría menos dependiente de Rusia y la influencia de Moscú en Cuba y otros países de América Latina podría reducirse”, dijo Arbatov, citado por RIA Novosti.
Según el académico, el gobierno de EEUU busca convertir a antiguos enemigos en aliados con el fin de aislar a Rusia y a China.
Sin embargo, Cuba debería tener cuidado con respecto a tales iniciativas estadounidenses por mucho que le guste ver levantado el embargo, dijo Arbatov, que cree que las autoridades actuarán para impedir que el flujo de turistas o la presencia de compañías estadounidenses socave su independencia, soberanía y sistema político.
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