La Marina de EE.UU. llevó a cabo las primeras pruebas de su nuevo helicóptero no tripulado de última generación, diseñado para volar el doble de tiempo que los actuales 'drones' de su arsenal y con más capacidad de carga.
TEl MQ-8C Fire Scout realizó dos vuelos cortos en un espacio restringido en la base naval del condado de Ventura, en California, en los que se pusieron a prueba los sistemas de control autónomos, informa Reuters.
"El desarrollo de estos vehículos no tripulados mejorará el apoyo aéreo (…) y entrará en operación a partir del próximo año", dijo el capitán Patrick Smith, director del programa Fire Scout de la Armada norteamericana.
Esta nueva arma del arsenal estadounidense es un helicóptero espía robótico desarrollado por la compañía Northrop Grumman, dotado con potentes cámaras, radares y sensores.
Además, está diseñado para volar hasta 12 horas y llevar una carga de hasta 454 kilogramos.
La Armada de EE.UU. ya ha llegado a un acuerdo con la compañía productora para la compra de seis MQ-8C Fire Scout, de un total de 30 que pretende adquirir, aunque no se ha revelado la suma del contrato.
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