Trípoli, 15 jun (PL) Milicias y miembros de las fuerzas de seguridad libias chocan desde hoy en la madrugada en la ciudad oriental de Bengasi, a pocos días de incidentes entre grupos armados y la población que ocasionaron 30 muertos.
El mando militar emitió un comunicado en el cual advierte que la crisis "puede ocasionar un baño de sangre", pero los choques, en los cuales se han reportado tres muertos en las filas oficiales, persisten con el uso de fusiles y lanzagranadas portátiles, acorde con testigos en el terreno.
"Si las fuerzas especiales son atacadas habrá un baño de sangre", declaró el jefe interino del Ejército libio, Salem al Konidi, quien instó a los notables de Bengasi a interponer sus buenos oficios para detener la violencia.
Los combates comenzaron alrededor de las 04:00 (02:00GMT) cuando miembros de las fuerzas especiales libias respondieron al fuego de un "grupo fuera de la ley", acorde con un post en la página de Facebook del cuerpo militar.
Las informaciones más frescas indican que los combates se generalizaron después que docenas de manifestantes desalojaron de su base en Bengasi a los miembros de una agrupación armada que controlan zonas de esa ciudad y esta capital al margen del control oficial.
Las milicias que sirvieron de sombrilla a la agresión de la OTAN contra el Gobierno de Muamar Gadafi rehúsan deponer las armas y se han constituido en un poder paralelo a las autoridades, a las cuales obligaron semanas atrás a adoptar una ley que prohíbe a exfuncionarios desempeñar cargos públicos tras sitiar los ministerios de Justicia y de Exteriores.
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