EE.UU. podrá provocar un nuevo conflicto entre El Líbano y el régimen israelí en su afán por sembrar la discordia en el Oriente Medio.
En una entrevista con la agencia rusa de noticias Sputnik, el embajador de Rusia en El Líbano, Alexander Zasypkin, condenó la campaña de Washington contra Irán y contra el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) que, aparte de desestabilizar la región, aumenta la probabilidad de un nuevo conflicto entre Beirut y el régimen de Tel Aviv.
“Los pueblos [del Oriente Medio] demandan una solución a las crisis existentes, el retorno de la paz y la cooperación. La alternativa opuesta a tal deseo es la incitación de nuevos conflictos por parte de los estadounidenses, que podrían involucrar a muchos países, también a fuerzas étnicas y religiosas”, dijo el embajador de Rusia en el Líbano.
Frente a la perniciosa actuación de EE.UU., el diplomático alabó a Hezbolá como “responsable” en parte de la derrota del terrorismo en Siria, al cooperar, a petición de Damasco, con Irán y Rusia en la lucha contra los grupos terroristas en el vecino país árabe.
Desde el inicio de la crisis de Siria en 2011, Hezbolá e Irán nunca han escatimado su apoyo a Damasco contra los numerosos grupos armados y terroristas que, por orden de países extranjeros como Arabia Saudí, Turquía y Estados Unidos, trataban de derrocar al presidente sirio, Bashar al-Asad.
El régimen israelí ha librado tres guerras en El Líbano: en 1982, 2000 y 2006. Después de la última contienda bélica, la capacidad disuasiva de Hezbolá ha crecido notablemente, según señalan las autoridades israelíes, aventurando que el movimiento guarda en sus arsenales aproximadamente 150 000 misiles y podría derrotar al régimen de Tel Aviv.
Las tensas relaciones entre Israel y El Líbano empeoraron a finales del año pasado después de que el ejército israelí lanzó una operación en la frontera para desmantelar los supuestos “túneles de ataque excavados” por Hezbolá.
El régimen de Israel, además, viola de manera repetitiva el territorio y el espacio aéreo de El Líbano con sus tareas de reconocimiento y espionaje, actos que infringen la resolución 1701 de 2016 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) que determina las condiciones del alto el fuego que puso fin a la guerra israelo-libanesa.
Fuente: Hispan TV.
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