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Un combatiente marroquí arrepentido de su paso por el Estado Islámico (EI) ha asegurado que el grupo terrorista está dominado por iraquíes y sirios, que mantienen al resto de árabes y musulmanes en posiciones subalternas, según el diario Ajbar Yaum.
El combatiente, identificado como A.A., procedente de Tetuán y que desea regresar a Marruecos, hizo las declaraciones al diario, conocido por publicar testimonios de los combatientes marroquíes en EI, desde algún punto de la frontera sirio-turca.
Los marroquíes no gozan de los mismos "privilegios de seguridad" que reciben los sirios e iraquíes durante los combates, y de hecho aseguró que los marroquíes, y los "extranjeros" en general, son utilizados como "peones" durante los combates.
El combatientes contó al diario que durante su militancia en el EI vivía "aterrorizado" por el peligro al que se exponen y la cantidad de espías internos que vigilaban el comportamiento de cada yihadista extranjero, lo que le llevó a huir y refugiarse en un campamento de sirios establecido en la frontera de Turquía.
El yihadista arrepentido que expresó al diario su deseo de volver a Marruecos explicó que EI no obliga a los combatientes que se incorporan en él a desprenderse de sus pasaportes, pero los propios combatientes muchas veces los rompen como muestra de lealtad.
El diario subrayó, a través de otros testimonios recogidos del EI, que también los saudíes están en esa "jerarquía" en el seno del grupo terrorista, junto a sirios e iraquíes.
Mientras, marroquíes, tunecinos y chechenos son usados como carne de cañón durante los enfrentamientos por órdenes del autoproclamado califa del EI, Abu Bakr al Baghdadi.
Según las estadísticas oficiales, un total de 1.354 marroquíes combaten en las filas de grupos terroristas en las zonas de tensión, de los que 246 murieron en Siria y 40 en Irak, y otros 156 personas volvieron a Marruecos.
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