Raffaella M. Breeze
El impacto económico de la violencia en todo el mundo es equivalente a 9,8 trillones de dólares, el 11,3% del PIB de todo el planeta.
El conflicto en el mundo empeora su situación por séptimo año consecutivo, sobre todo debido a la influencia de dos zonas: África subsahariana y el norte de África y Oriente Medio.
Más de 20 soldados murieron en el este de Ucrania, según un partido ucraniano
La violencia, el conflicto y las guerras del mundo hacen que, por séptimo año consecutivo, el mundo sea cada vez un lugar menos pacífico. Según el informe anual del think tank Institute of Economics and Peace, que ha presentado su Índice de Paz Global, el planeta en el último año fue ligeramente más violento que el año anterior.
Las razones para este emperoramiento son debido cuatro indicadores:terrorismo, número de conflictos internos y externos, muertes por conflictos internos y número de personas desplazadas. Dentro de este aumento de la violencia, los autores del informe aseguran que se consolida la tendencia a más conflictos internos (guerras civiles) frente a una reducción de conflictos entre países.
Le grupo ha presentado los resultados de su índice anual, en el que se muestra que, al año, las guerras y la violencia tienen un efecto económico de 9,8 trillones de dólares: el equivalente a 1.305 dólares por cada uno de los 7.046 miles de millones de personas que viven en el mundo. Esta cifra se calcula como el coste que le supone al planeta tratar las consecuencias de esta violencia y es un incremento del 3,8%.
Islandia, el país más pacífico
Europa es la líder mundial de la paz. A pesar de conflictos en Ucrania, la región se mantiene como la más pacífica, con Islandia, Dinamarca y Austria en lo alto de la tabla de países con menos conflicto. En el extremo opuesto de la tabla se encuentra el sudeste asiático, que es la región más violenta.
El país más violento es este año Siria, debido a una leve mejora de Afganistán, hasta ahora el país más violento del mundo y un empeoramiento de la situación en Siria.Sudán del Sur es la nación que más ha empeorado y ha caído del puesto 145 al 160, convirtiéndose en el tercer país más peligroso del planeta.
La mejoría más notable, de acuerdo al índice, ocurrió en Georgia, que ha vuelto progresivamente a la normalidad después de su conflicto con Rusia en 2011. Costa de Marfil presentó la segunda mejoría más destacada, con grantes reducciones en las probabilidades de protestas violentas y desplazamientos de personas.
Raffaella M. Breeze
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