El Ejército yemení y las fuerzas populares han continuado sus operaciones en la ciudad de Al Juba, en la provincia de Yizan, al sur de Arabia Saudí, y tomado varias posiciones estratégicas.
Las fuerzas yemeníes tomaron el control de la base militar de Al Shabaka después de cortar las líneas de suministro en la parte norte de la región de Al Juba.
Tras la toma de Al Shabaka y de cortar las líneas de suministro de Al Juba, el Ejército yemení y las fuerzas de Ansarulá dominan ahora un lugar de importancia estratégica para ambas partes en la guerra.
En la provincia saudí de Asir, las fuerzas yemeníes impidieron el lunes a las tropas saudíes avanzar hacia la ciudad de Al Rabua por segundo día consecutivo. Los militares saudíes estuvieron apoyadas por aviones que llevaron a cabo 350 salidas en apoyo de sus fuerzas que se dirigían a Al Rabua, que está bajo el control de las fuerzas yemeníes desde hace varios meses.
Según la agencia Khabar, decenas de militares saudíes resultaron muertos o heridos, incluyendo un capital. Las fuerzas yemeníes lanzaron también 43 cohetes katiusha contra concentraciones de tropas saudíes situadas al oeste de la base de Gawiya.
Por otro lado, un oficial saudí y cinco de sus soldados murieron en una emboscada del Ejército yemení y las fuerzas populares en la provincia de Nayran, al sur de Arabia.
Los militares saudíes fueron abatidos en la región de Al Sharfa, en la provincia de Nayran, cuando recibieron disparos de las fuerzas yemeníes, que les tendieron una emboscada el lunes.
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