El enfriamiento entre Moscú y Kiev repercutirá en la capacidad defensiva de Rusia

Nezavisimaya Gazeta© RIA Novosti. Vladimir Fedorenko

16:45 31/03/2014

Moscú, 31 de marzo, RIA Novosti.

El deterioro de las relaciones entre Moscú y Kiev podría repercutir en la capacidad defensiva de Rusia cuyas fuerzas nucleares dependen en cierto grado de la industria militar de Ucrania, escribe hoy Nezavisimaya Gazeta.

“Hasta que el conflicto se arregle, nuestras relaciones con Rusia seguirán congeladas”, advirtió el jefe del grupo del sector de defensa Ukroboronprom, Yuri Teréschenko.

Las empresas de defensa ucranianas ayudan a las fuerzas nucleares estratégicas de Rusia en las tareas de mantenimiento, en particular, de los misiles balísticos intercontinentales RS-20V Voevoda que se conocen en Occidente como “Satanás”.

Desarrollados en los años 1980 por la oficina de diseño KB Yuzhnoe de Dnipropetrovsk, Ucrania, estos misiles constituyen un elemento importante en el sistema de disuasión nuclear estratégica de Rusia.

El director del Centro ruso de Estudios Políticos y Sociales, Vladímir Yevséyev, recordó que los técnicos de KB Yuzhnoe “se encargan del servicio de garantía”, lo que permite en principio prolongar la vida operativa de los RS-20V Voevoda hasta 2019 o 2021.

Mientras, el teniente general Yuri Netkachev opina que “EEUU hará lo posible por que Rusia deje de usar los misiles Voevoda”.

“Para ellos es un objetivo estratégico, la liquidación de misiles pesados de esta clase debilitaría las fuerzas nucleares estratégicas de Rusia y potenciaría el sistema global estadounidense de defensa antimisiles”, dijo el experto.

EEUU y otros países de la OTAN, a su juicio, tratarán de mantener a Ucrania en un estado de “caos controlado” y obstruir en lo posible su cooperación militar con Rusia.

Los suministros de Ucrania también son importantes para otras armas. La compañía ucraniana Zaria-Mashproyekt es la proveedora de turbinas de gas para buques de guerra rusos. La empresa Motor Sich, a su vez, es el fabricante de motores para helicópteros de la marca Mi y para el avión de transporte An-124 Ruslán.

Para superar esta dependencia, Rusia necesitará tiempo. El próximo año, la empresa rusa Klimov será capaz de fabricar al año 450 equipos similares a los de Motor Sich. Y hacia 2016 o 2018, Rusia podría crear un misil balístico intercontinental del tipo Voevoda.