Rusia tiene la intención de atacar las posiciones de los terroristas en Siria por medio de nuevos tipos de misiles con el objetivo de aumentar la precisión de sus lanzamientos.
Según fuentes militares, los cazabombarderos rusos que despegarán a partir del mes de noviembre del portaaviones ruso Almirante Kuznetsov llevarán misiles X-38 y sistemas de ataque de precisión no teledirigido SVP-24.
Según estas informaciones, estos misiles irán a bordo del portaaviones Almirante Kuznetsov, que partirá en noviembre a las aguas del Mediterráneo Oriental en el marco de las operaciones de lucha contra el terrorismo. El navío está equipado con aviones Su-33 de caza, MIG-29 y helicópteros K-52.
La precisión del misil X-38 permitirá reducir pérdidas de civiles e incrementará las bajas de los terroristas.
El misil X-38 pesa 520 kgs y mide más de 4 metros. Su cabeza explosiva pesa 250 kgs y puede ser nuclear o convencional. Una vez lanzado desde el avión el misil se dirige a su blanco a más de 2.600 km/h.
Todo ello hace que los daños producidos por los ataques con tales misiles sean considerables y es de suponer que tales armas tengan grandes efectos en las operaciones contra el terrorismo en Siria.
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