El secretario de Defensa de EE.UU., Ashton Carter (izda.), se reúne con el premier iraquí, Haidar al-Abadi, en Bagdad, 11 de julio de 2016.
El Departamento de Defensa de EE.UU. anuncia el envío de otros 560 militares al suelo iraquí para, según alega, luchar contra el terrorismo de EIIL.
“Estados Unidos enviará 560 militares más a Irak para ayudar en la lucha contra la organización EIIL”, ha comunicado este lunes el secretario de Defensa de EE.UU., Ashton Carter.
En declaraciones formuladas en Bagdad, capital iraquí, en el marco de una visita de relámpago al país árabe, ha considerado que esas fuerzas tendrán la misión de abordar la forma de combatir al grupo terrorista takfirí EIIL (Daesh, en árabe) y recuperar la ciudad de Mosul, capital de la provincia norteña de Nínive.
Estados Unidos enviará 560 militares más a Irak para ayudar en la lucha contra la organización EIIL”, ha comunicado este lunes el secretario de Defensa de EE.UU., Ashton Carter.
Mientras no ha precisado la fecha y el lugar del despliegue de las fuerzas estadounidenses, ha explicado que con este despliegue, la cifra de los militares estadounidenses en Irak, esencialmente para misiones de formación de las tropas iraquíes, llegará a 4600.
La agenda del jefe del Pentágono en Irak incluye encuentros con el primer ministro de Irak, Haidar al-Abadi, los jefes militares, en especial el general estadounidense Sean MacFarland, comandante de la operación contra el EIIL, y el ministro iraquí de Defensa, Jaled al-Obeidi.
También, mantendrá una conversación telefónica con el presidente de facto de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí (norte), Masud Barzani.
“Lo que hablaré con el primer ministro Al-Abadi y nuestros comandantes allí será los próximos pasos de la campaña, que incluyen la caída y toma de control de Mosul”, detalló Carter en afirmaciones antes de su viaje a Bagdad.
El objetivo último es “que las fuerzas iraquíes de seguridad recuperen todo el territorio de Irak. Evidentemente, Mosul es lo más importante en todo esto”, prosiguió.
En reiteradas ocasiones, las autoridades norteamericanas han anunciado planes de Washington para el engroso de sus fuerzas en el territorio iraquí.
En reacción, Al-Abadi ha recordado a EE.UU. que cualquier despliegue de sus tropas en el país árabe se debe llevar a cabo con el consentimiento del Gobierno de Bagdad.
Por su parte, las fuerzas populares iraquíes han prometido luchar contra el nuevo despliegue de tropas estadounidense, tal como lo han hecho en el pasado.
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