AgenciasEl Cairo/SanáActualizado: 03/05/2015 14:24 horas
Arabia Saudí está utilizando las controvertidas bombas de racimo en su guerra contra los rebeldes hutíes en Yemen, denunció hoy la organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW).
Fotografías e imágenes de vídeo, entre otras, demostrarían que esas armas, controvertidas por su poder de dispersión en un área muy amplia y prohibidas internacionalmente, fueron usadas en un ataque aéreo en el norte de Yemen, señaló el grupo basado en Estados Unidos.
La munición, suministrada por Estados Unidos, afectó a una zona de cultivo situada a unos 600 metros de varios grupos de viviendas, señala HRW. Los ataques tuvieron lugar en la provincia de Saada, en el feudo de los rebeldes chiitas en el norte del país.
"Las bombas de racimo saudíes han afectado áreas cercanas a pueblos, poniendo en peligro a la población local", dijo Steve Goose, responsable de cuestiones armamentísticas de HRW.
La Convención de Municiones en Racimo de 2008 prohíbe el uso o la acumulación de ese tipo de armas, que puede dejar partes esparcidas por un terreno muy amplio sin explotar y causar víctimas civiles años después.
Arabia Saudí, Yemen y Estados Unidos no se encuentran entre los 91 países firmantes y por ello el tratado no es vinculante para ellos. "Arabia Saudí y otros miembros de la coalición y el proveedor, Estados Unidos, están incumpliendo, sin embargo, el estándar global que rechaza las bombas de racimo por el peligro que supone a largo plazo para la población civil".
Arabia Saudí y una coalición de ocho países árabes aliados llevan a cabo una campaña aérea contra los rebeldes hutíes desde finales de marzo, cuando los rebeldes avanzaron sobre Adén, el feudo sureño del presidente Abd Rabu Mansour Hadi, reconocido internacionalmente, y lo obligaron a huir de Yemen. El objetivo es frenar el avance de los rebeldes chiítas, que han tomado gran parte del país, incluyendo la capital Saná.
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