foto http://www.meneame.net/
Por Enrique Montánchez / Efe
Última actualización 05/09/2014@14:49:27 GMT+1
La entrega esta semana de material militar al Gobierno de Kiev ha dinamitado las relaciones entre España y Rusia, ya de por sí bastante frías tras la decisión española de dar luz verde a Estados Unidos para desplegar en Rota el componente naval del escudo antimisiles que Moscú considera está dirigido contra su propio territorio.
El Gobierno español no ha dudado en cerrar filas en torno a su aliado más estrecho, Estados Unidos, aunque ello suponga dar portazo a las relaciones con Moscú, que la diplomacia española había tejido pacientemente en los últimos años y cuyo ejemplo más reciente fue el convenio firmado el pasado julio para desbloquear las adopciones de niños rusos por matrimonios españoles, un acuerdo aún pendiente de aprobación por los parlamentos de ambos países.
El conflicto de Ucrania ha dividido a Europa y a la OTAN en dos bloques: por un lado, las naciones más beligerantes contra Putin, bajo el liderazgo de Estados Unidos; y, por otro, el grupo más cauto, encabezado por la Alemania de Merkel.España se alineaba esta semana con los primeros, tras la entrega a Ucrania de 300 cascos y 500 chalecos antifragmentos, dentro de una donación de material militar como parte de un conjunto de medidas de apoyo al Ejército de Kiev promovidas por la OTAN.
Con esta entrega -aunque en algunos círculos se le ha dado un carácter de ayuda humanitaria al ser elementos de protección personal- Madrid enviaba a Moscú un mensaje nítido de que en los momentos críticos permanece junto a sus aliados. Esta solidaridad obliga a participar, en la medida de nuestras posibilidades, en la puesta en marcha de unafuerza de acción rápida formada por 4.000 militares con capacidad de desplegarse en menos de 48 horas, iniciativa puesta sobre la mesa en la cumbre de la ciudad galesa de Newport ante una eventual intervención de la OTAN en Ucrania.
El pasado junio el Ejecutivo de Mariano Rajoy puso a disposición de la OTAN el cuartel general terrestre de alta disponibilidad ubicado en Bétera (Valencia), un centro de mando y control proyectable que reúne las capacidades necesarias para convertirse en el Cuartel General de la citada fuerza de acción rápida.
Además, España tiene previsto enviar este otoño cuatro cazabombarderos Eurofighter a los países bálticos parareforzar el despliegue de la OTAN en el este de Europa, y ha ofrecido un avión Boeing 707 con capacidad de guerra electrónica, dos fragatas (una para el Báltico y otra para el Mediterráneo oriental) y un batallón mecanizado.
La decisión de Madrid de cruzar el Rubicón en el conflicto ucraniano coincidía con el ultimátum de la OTAN a Moscú, el jueves 4 de septiembre durante la reunión de Newport, para que retire sus tropas de Ucrania. Si bien algunos servicios de inteligencia occidentales discrepan de que se haya producido dicha invasión. Los aliados se han comprometido a apoyar a Kiev en lo que se califica como el mayor cambio estratégico desde el final de la Guerra Fría.
El progresivo deterioro de las relaciones hispano-rusas ha irrumpido también en el siempre determinante capítulo económico con la prohibición de Moscú de importar carne, pescado, frutas, verduras y productos lácteos procedentes de la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y Australia durante un año, en respuesta a las sanciones impuestas por Estados Unidos y la UE. La Unión Europea vende alimentos a Rusia por importe de 10.000 millones de euros anuales.
Las exportaciones españolas de alimentos a Rusia ascienden a casi 600 millones de euros al año. Paradójicamente, parte de los productos alimenticios que España dejará de vender serán proporcionados por Argentina, tras los acuerdos de cooperación firmados entre Putin y la presidenta Cristina Fernández.
Apoyo sin fisuras a Washington, fuerte compromiso con la OTAN en Ucrania, cierre del mercado ruso para la fruta española, merma de la relación personal entre Putin y don Juan Carlos tras su abdicación, son factores que han congelado en pocos meses las relaciones hispano-rusas, a juicio de fuentes diplomáticas.
La última mala noticia al respecto es una caída en picado del turismo ruso hacia España, que en los últimos cinco años había crecido vertiginosamente. Las visitas disminuirán cerca de un 40% en 2014, tras reducirse a la mitad las reservas este verano. El pasado año nos visitaron 1,5 millones de turistas rusos y España ocupó el sexto puesto en la lista de sus destinos más populares.
Las causas del desplome hay que buscarlas en la depreciación del rublo, el conflicto con Ucrania y la recomendación del Gobierno ruso a sus ciudadanos de evitar viajar al extranjero.
Ante este escenario, España no debe congelar sus relaciones con Rusia que, no olvidemos, es uno de los países BRICS, junto con China, India, Brasil y Sudáfrica. Este poderoso bloque emergente que está configurando a marchas forzadas la nueva economía mundial, y al que en breve se unirán los países asiáticos y africanos con mayores cotas de desarrollo y recursos naturales, reúne casi la mitad del PIB y dos tercios de la población mundiales.
Volver la espalda al papel que Rusia está jugando en esta nueva realidad económica y geoestratégica, sería una torpeza que Europa y España terminarían pagando a un altísimo precio. El único camino inteligente en estos momentos es la convocatoria urgente de una cumbre Unión Europea-Rusia que, como primer resultado, frene la actual escalada militar después de que en las últimas horas se haya conocido que Moscú ha puesto en estado de máxima alerta sus fuerzas nucleares estratégicas, lo que nos sitúa a todos al borde del precipicio.
http://www.onemagazine.es/noticia
Eso es lo que pasa al ser un satélite de USA, pena me da Europa, decadente y satelizada...¿una casualidad el problema con Rusia y con el gas ruso ahora que USA con el fracking ha pasado de no tener gas a poder exportarlo porque le sobra.......???? Europa debe integrar a Rusia y empezar a tener una politica geostrategica propia porque estos yankis nos llevan al apocalipsis
ResponderEliminarEn los años que llevo on este blog, una de las ideas que siempre he repaldado es la europeiación total, ya que el Atlantico es demasiado ancho, para depender de USa. Creemos que con el fracking se soluciona todo, pero nos llevará a un aumento de los costes que repercutirá indudablemente en todos nosotros. Rusia es el furturo energetico europeo, pero si los polítocos no lo ven es que tienen una venda en los ojos, la preguta es ¿a quien ha apretado el nudo de ella?
ResponderEliminarGracias amigo