Los equipos, que pertenecían a la empresa pública Navantia, estaban almacenados en El Burgo de Ebro
Setenta baterías de 600 kilos cada una de ellas, fabricadas en plomo y cobre, valoradas en 469.000 euros y destinadas a equipar submarinos militares fabricados por la empresa pública española Navantia, han sido robadas en Zaragoza y parcialmente recuperadas por la Guardia Civil. Parcialmente, porque cuando han dado con el destino final de estos equipos todos ellos —salvo nueve de las 70 baterías— ya estaban en industrias especializadas en desmontar y reciclar este tipo de artilugios para recuperar el metal.
El robo fue denunciado en los últimos meses por el propietario de la nave en la que las 70 baterías de submarino se encontraban almacenadas desde hacía tiempo. Fabricadas en Zaragoza por contrato con Navantia, esta empresa pública las dejó en esa nave de El Burgo de Ebro (Zaragoza) a la espera de poder aprovecharlas.
Están relacionadas con la fabricación del nuevo modelo de
submarino S-80 que Navantia lleva tiempo tratando de sacar adelante y cuyo diseño ha tenido que reajustar, tras detectar problemas de viabilidad en los prototipos.
El robo se produjo, como mínimo, hace más de mes y medio. La Guardia Civil ha podido constatar finalmente que los ladrones vendieron una primera remesa de esas baterías entre los días 7 y 9 del pasado mes de marzo. Se deshicieron de una pequeña parte de esas baterías de submarino por 2.000 euros, pese a que el valor de mercado de cada una de ellas es de 6.700 euros.
La empresa zaragozana que se las compró, dedicada al reciclaje de metales, las revendió rápidamente por 4.500 euros a otra compañía de Bilbao, una de las tres únicas industrias que tienen capacidad en España para reciclar baterías de tal envergadura.
El resto de las baterías de submarino que habían sido robadas fueron compradas por otra empresa de reciclaje de metales de Zaragoza situada en el polígono industrial Cogullada. Ésta compró a los ladrones 47 baterías por 12.000 euros y las revendió aceleradamente a otras empresas especializadas, una situada en Soria y otra en Pina de Ebro (Zaragoza).
Por estos hechos han acabado detenidos los dos presuntos autores del robo, dos españoles, vecinos de Zaragoza, de 28 y 49 años. Por un delito de recpetación también han sido arrestados quienes les compraron ese material para revenderlo. Se trata de tres vecinos de Zaragoza, dos españoles y otro de nacionalidad china, de edades comprendidas entre los 52 y los 64 años.
El caso fue resuelto por la Guardia Civil porque el camión en el que los presuntos ladrones trasladaban varias de esas baterías se les quedó atascado en un camino próximo al polígono industrial zaragozano «Marqués de Arlanza». Al acudir agentes de la Benemérita sospecharon que la carga —nueve grandes baterías— era de procedencia ilícita. Detuvieron a los dos hombres que estaban junto al camión —a los que se acusa de haber cometido el robo de las baterías— y empezaron con las investigaciones para dar con el destino final de esos equipos.
http://www.abc.es/