Al menos 15 personas han muerto desde el incremento de los combates en el área de Avdiivka el fin de semana. Foto: Reuters.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanosexpresó hoy preocupación por la escalada de los combates en el este de Ucrania, a partir de su impacto en la población civil y la infraestructura vital.
A lo largo de la línea de contacto, entre el gobierno y los rebeldes del Donbass, al menos siete personas fueron asesinadas y 41 resultaron heridas desde el 29 de enero, advirtió la portavoz Ravina Shamdasani en declaraciones a la prensa en Ginebra, sede de la Oficina.
Según la vocera, solo en la noche de ayer, los bombardeos dejaron tres civiles muertos y 13 lesionados, tanto en las ciudades de Donetsk como de Avdiivka.
Varias localidades ubicadas en la línea de contacto entre las partes enfrentadas carecen de agua, electricidad y calefacción, pese a las altas temperaturas imperantes en la zona, dijo.
Shamdasani señaló que los reportes desde el terreno indican que los ataques artilleros impactaron dos hospitales, una policlínica, un centro dental, tres escuelas y un círculo infantil en Donetsk, controlada por los insurgentes, y Adviivka, en territorio de Ucrania bajo dominio gubernamental.
Los actores del conflicto se acusan mutuamente por la escalada de los combates, enmarcados en la crisis que estalló en el este ucraniano en febrero de 2014, tras un golpe de Estado promovido por Occidente.
Esa acción llevó al poder a autoridades caracterizadas por posturas radicales y antirusas, lo cual generó una sublevación y la declaración unilateral de la independencia de Donetsk y Lugansk.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos exigió al gobierno y a los rebeldes respeto a los principios de distinción, proporcionalidad y precaución.
Deben tomarse en el este de Ucrania todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la población civil, insistió a través de su portavoz Shamdasani.
La víspera, el Consejo de Seguridad celebró una sesión dedicada a la crisis ucraniana, una copia de las decenas de reuniones sobre el tema realizadas en los últimos años.
Ucrania y Occidente acusaron a Rusia de provocar la escalada del conflicto, a lo que Moscú respondió denunciando una campaña dirigida a politizar la crisis.
El embajador ruso Vitaly Churkin señaló a Kiev como responsable de disparar las hostilidades en la línea de contacto, violando lo acordado en los protocolos de Minsk de 2015, una iniciativa multinacional para detener los enfrentamientos.
Churkin precisó que el objetivo del gobierno ucraniano es enfrentar a presidentes que acaban de llegar al cargo, en clara alusión al estadounidense, Donald Trump, con Moscú y obtener financiamiento externo.
Ucrania necesita dinero de la Unión Europea, de Estados Unidos y de las instituciones financieras, y espera conseguirlo provocando una escalada de la violencia y colocándose después como víctima, denunció en el Consejo.
(Con información de Prensa Latina)
http://www.cubadebate.cu/noticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario