El Ejército yemení y los comités populares han infligido fuertes pérdidas a las fuerzas saudíes que lanzaron el domingo una ofensiva en Maarib, un punto estratégico desde el que ellos buscan avanzar hacia la capital, Sanaa, que continúa en manos del Ejército yemení y los combatientes de Ansarulá.
Fuertes combates han estado teniendo lugar en la provincia de Maarib, donde las fuerzas de la coalición presionan para lanzar una ofensiva contra Sanaa, dijeron fuentes militares yemeníes el domingo.
La resistencia a la que hace frente la ofensiva terrestre es encarnizada. Decenas de soldados saudíes, emiratíes, bahreiníes y qataríes y mercenarios a su servicio han muerto o han resultado heridos.
“Las fuerzas de la coalición están gritando y pidiendo ayuda”, señalan las fuentes militares en referencia a las fuertes pérdidas infligidas a los invasores.
“Además, 24 vehículos blindados de la coalición resultaron destruidos en una operación en Hamat al Massariya mientras que los valerosos combatientes del Ejército y los Comités Populares están repeliendo la ofensiva”, dijeron las fuentes.
Movilización popular
Por otro lado, un gran número de combatientes yemeníes, muchos de ellos miembros de las fuerzas tribales, han sido movilizados para combatir contra las fuerzas de la coalición liderada por Arabia Saudí.
Según el sitio Hasad al Yum, más de un millón de yemeníes, incluyendo fuerzas tribales, se han movilizado y han recibido armas. Estas fuerzas están preparadas para luchar contra Arabia Saudí en los territorios yemení y saudí, añade el sitio.
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