Esta misma semana, el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Teodoro Esteban López Calderón, abordaba los retos actuales y futuros de la Marina española, entre los que destacaba las futuras fragatas F-110, el nuevo submarino S-80, que esperan recibir a partir de 2021, o la renovación de su Ala Embarcada.
Respecto de ésta última, en lo que se refiere al Ala Rotatoria (helicópteros), la preocupación está en las «viejas» once unidades operativas del SH-3D, pues a partir de este año «seríamos los únicos que los tendríamos». A la espera de la versión navalizada de los NH-90, seguirán sustituyéndolos temporalmente por otros SH-60F de segunda mano.
En lo que respecta al Ala Fija, el AJEMA fue claro al señalar que «la única alternativa» para sustituir a los Harrier es el F-35B estadounidense, a pesar de su elevado precio. Y es que, es el único que puede embarcar en el buque «Juan Carlos I», concebido pensando en estos aviones. «Si Defensa quiere contar con esta capacidad, la tendrá. Y si no, pues no la tendrá», ha sentenciado. Eso sí, dejó claro que no es una prioridad principal para la Armada a pesar de estar incluida en ese nuevo ciclo inversor, pues los «Harrier» tienen garantizada la vida hasta 2025, pudiendo extenderse incluso hasta 2030. Con todo ello, la Armada confía en que con el nuevo ciclo inversor “salgan adelante” todos sus programas.
Pero, cómo ¿es este avión de combate polivalente que presta sus servicios en algunos de los principales ejércitos occidentales, entre ellos Estados Unidos, Reino Unido, Israel, Noruega o Italia?
El F-35, fabricado por Lockheed Martin, es una aeronave de quinta generación, monoplaza y con capacidad furtiva, desarrollado bajo el programa Joint Strike Fighter para reemplazar al F-16, A-10, F/A-18 y al AV-8B en misiones de ataque a tierra, reconocimiento y defensa aérea. Fue diseñado en tres versiones distintas: el F-35A para despegue y aterrizaje convencional (CTOL), el F-35B capaz de realizar despegues cortos y aterrizajes verticales, que es el que necesita la Armada española para su buque “Juan Carlos I”, y el F-35C que es una variante naval capaz de operar en portaaviones.
Este avión es el descendiente del X-35 presentado por Lockheed-Martin en el programa Joint Strike Fighter (JSF), en el que compitió contra el X-32 propuesto por Boeing. El 24 de octubre de 2001 el prototipo X-35 fue anunciado como vencedor del concurso, que traía aparejado un contrato de 200.000 millones de dólares para fabricar el nuevo avión.
En la financiación del programa colaboran, además de los Estados Unidos, Reino Unido, Italia, Australia, Canadá, Dinamarca, Países Bajos, Noruega y Turquía, que aportaron fondos adicionales, razón por la cual a España le costaría más cara su compra, al incorporarse a un proyecto en el que no ha participado desde el inicio. Además, también los han adquirido Israel, Japón y Corea del Sur.
En su diseño y fabricación han colaborado un grupo de empresas aeroespaciales liderado por Lockheed Martin, con BAE Systems y Northrop Grumman como socios principales. El F-35 realizó su primer vuelo el 15 de diciembre de 2006.
En lo que se refiere al modelo concreto que quiere la Armada, el F-35B STOVL, actualmente presta servicio en la Marina de Estados Unidos y en la de Reino Unido, teniendo sus bases en las bases aéreas de Yuma (Arizona) y Beaufort (Carlonia del Sur), en el caso estadounidense. La Fuerza Aérea italiana también ha incorporado algunos de estos aparatos.
El F-35 es un caza de peso medio y monomotor, similar a una versión más pequeña, más convencional y con un solo motor, del Lockheed Martin F-22 Raptor pesado y bimotor, y de hecho ambos modelos comparten muchos elementos comunes.
La versión STOVL F-35B está diseñada para reemplazar a la segunda generación del Harrier, que fue el primer avión operacional de aterrizaje vertical y despegue corto, cuya participación en la Guerra de las Malvinas en 1982 demostró su efectividad en las operaciones de guerra desde portaaviones ligeros.
La RAF y la Armada Británica utilizarán este avión para reemplazar a los Harrier GR9 en sus portaaviones, mientras que el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos usará los F-35B para sustituir a los AV-8B Harrier II y a los F/A-18 Hornet.
El F-35B es similar en tamaño al F-35A de la Fuerza Aérea estadounidense, pero carece del cañón automático, que es opcional y debe ser transportado externamente en un contenedor bajo el fuselaje, ya que su lugar tras la cabina del piloto está ocupado en el F-35B por el impulsor vertical, innovación que fue uno de los factores decisivos en la selección del diseño ganador del programa JSF.
Para el despegue/aterrizaje vertical el F-35B utiliza un sistema distinto a las toberas giratorias del motor Pegasus de los Harrier. Consiste en una turbina, patentada por Lockheed Martin, desarrollada por Rolls-Royce y muy similar al sistema empleado en el Yakovlev Yak-141, en el que un turbopropulsor incrustado verticalmente en el centro del fuselaje proyecta su chorro de propulsión hacia abajo por medio de dos toberas situadas a cada lado del fuselaje, al mismo tiempo que se abren una pequeñas compuertas en la parte superior del avión para dejar pasar el aire al motor. Este sistema se complementa con la tobera del motor principal, de empuje vectorial y situada en la cola del avión.
La planta motriz del F-35B actúa como un multiplicador del flujo, de manera similar a un turbofán y consiguiendo el mismo efecto que la turbina principal del anterior caza Harrier. Sin embargo todo este mecanismo adicional es un peso muerto durante el vuelo normal del avión y reduce la capacidad de carga de armas y combustible del avión, así como limita su capacidad de ejecutar maniobras de altas G.
Durante el diseño, se utilizaron dos estructuras para realizar las pruebas de esta versión: el Lockheed X-35A (que más tarde sería convertido en el X-35B) y el X-35C, de mayor envergadura. 55 Una de las primeras demostraciones de la capacidad del X-35 fue durante las pruebas de vuelo para la calificación en el programa JSF, en LAS que el X-35B despegó tras una carrera de menos de 150 metros, alcanzó velocidad supersónica y aterrizó verticalmente. Un logro que el modelo de Boeing no pudo igualar.
El F-35B realizó su primer vuelo el 25 de febrero de 2009 y el 3 de octubre de 2011 comenzó sus pruebas iniciales de toma vertical sobre la cubierta del buque de asalto anfibio, de tipo LHD, USS Wasp.5758
Sin embargo, el avión, a pesar de sus características, ha recibido numerosas críticas, entre otras cosas por su elevado coste, ya que los costes del proyecto se dispararon. De hecho, Donald Trump amenazó con suspender el programa por el precio y sustituir los F-35 por la versión modernizada del F-18, aunque finalmente siguió adelante y se mantiene su fabricación.
De hecho, uno de los mayores inconvenientes de este avión, al menos para España, es su elevado precio, pues cada unidad costaría entre 90 y 130 millones de euros, sin contar el motor, y la Armada no compraría más de una docena de aparatos. Por este motivo, el Ejército del Aire estudia si se une a la compra y lo incorpora también a su flota, con el objetivo fundamental de sustituir a los F-18.
Características
Tripulación: 1 piloto
Longitud: 15,67 m
Envergadura: 10,7 m
Altura: 4,33 m
Superficie alar: 42,7 m²
Peso vacío: 13 300 kg
Peso cargado: 22 470 kg
Peso máximo al despegue: 31 800 kg
Planta motriz: 1× turbofán con postquemador Pratt & Whitney F135.
Empuje normal: 28 000 lbf (125 kN) de empuje.
Capacidad interna de combustible: 8.382 kg
Rendimiento
Velocidad máxima operativa (Vno): 2 205 km/h (1 370 MPH; 1 191 kt) (Mach 1,8)
Autonomía: 2 220 con combustible interno
Techo de vuelo: 18 288 m (60 000 ft)85
Empuje/peso: 0,87
Límite de fuerzas soportadas: 9 G
Armamento
Cañones: 1× cañón rotativo de 4 cañones General Dynamics GAU-22/A Equalizer de calibre 25 mm, montado internamente con 180 proyectiles
Puntos de anclaje: 6 pilones subalares con capacidad para 6.800 kg y 2 bodegas internas con cuatro pilones cada una con una capacidad total de 8.100 kg para cargar una combinación de bombas de propósito general: Mark 82, Mark 83 y Mark 84; bombas de racimo: Mk 20 Rockeye II, con capacidad de guiado WCMD; bombas guiadas por láser de la serie Paveway; bombas guiadas por satélite de la serie JDAM; GBU-39 Small Diameter Bomb; bomba nuclear B61
Misiles aire-aire:
De corto alcance: AIM-132 ASRAAM, AIM-9X Sidewinder e IRIS-T
De medio/largo alcance: AIM-120 AMRAAM, MBDA Meteor (pendiente de ser integrado) y el futuro JDRADM (a partir de 2020)
Misiles aire-superficie:
Misiles de crucero: AGM-154 JSOW, AGM-158 JASSM y SOM (Turquía)
Misiles antitanque: Brimstone
Misil antibuque JSM