El 'pez dorado' soviético, el submarino más veloz jamás construido
Hace 49 años, un 21 de diciembre de 1968, el submarino K-222 fue botado en los astilleros de Severodvinsk. Este sumergible de segunda generación estaba obligado a ser todo un pionero para la época e incluso hoy mantiene el título del más veloz jamás construido.
Durante su diseño, a los ingenieros los movió un único objetivo: crear un aparato inalcanzable para los medios de combate enemigos. Para eso se les permitió desviarse de las normas convencionales de la construcción naval militar e incluso se les prohibió reutilizar algunas soluciones técnicas ya empleadas en sus antecesores. Por todo esto, el proyecto resultó ser altamente innovador.
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Fue el primero en portar un casco de titanio, diseñado para lanzar misiles de crucero desde debajo del agua y, aún hoy, mantiene el título de submarino más veloz jamás construido. Por su alto precio, 2.000 millones de rublos según el curso de 1968, este buque fue apodado por su tripulación el 'pez dorado'. De hecho, es el único submarino de proyecto 661 Anchar construido.
El buque resultó ser bastante compacto para sus capacidades. Con una eslora (largo) de 106 metros y una manga (ancho) de 11,6 metros, desplazaba unas 7.000 toneladas en estado de inmersión. Durante su explotación, logró varios récords de velocidad de navegación y aún mantiene el título del más veloz jamás construido: en 1970 alcanzó los 44 nudos (más de 82 km/h) bajo el agua.
Un año más tarde, el K-222 protagonizó un curioso episodio con un portaviones estadounidense. Durante su misión en el océano Atlántico se encontró con el sexto grupo de ataque de la flota estadounidense, liderado por el portaviones USS Saratoga CV-60. El K-222 se pegó a la popa del Saratoga que, en varias ocasiones intentó escapar de la persecución a 30 nudos. No obstante, nunca lo logró. El submarino estuvo 'сazando' al buque estadounidense durante dos meses y medio.
Después de varios intentos fallidos de los estadounidenses, el K-222 decidió iniciar un acercamiento y sobrepasó con claridad al USS Saratoga y a su grupo de escolta.
Este submarino único en su especie fue dado de baja en 1988. La experiencia de su diseño y explotación sirvió a los constructores navales para crear los siguientes sumergibles polivalentes de titanio de la segunda y tercera generación, incluidos los más veloces puestos en serie de proyecto 705 Lira.