Damasco, 26 abr (PL) El Ejército sirio incrementa y aplica nuevas capacidades técnicas frente a los grupos terroristas en una guerra impuesta que asume cada vez más tácticas y estrategias diferentes.
Así se ha hecho tanto en la recaptura de Palmira y Alepo como en las continuas y actuales batallas en la provincia de Hama, en el centro del país, combinándose de manera más eficiente la cooperación entre las unidades terrestres, la aviación y la artillería.
En las más recientes imágenes publicadas en las redes sociales se puede ver cómo los soldados sirios utilizan inhibidores de drones para hacer aterrizar a los aviones no tripulados de los grupos armados en el norte de esa última provincia, un sistema que además, protege espacios sensibles en el despliegue de efectivos.
El empleo de esa técnica permite además, anular la señal de los equipos de geolocalización del dron, así como su enlace de comunicación con la estación de control que lo maneja.
Las fuerzas sirias lo emplean ahora después de que en los últimos meses, los grupos terroristas como el otrora Frente Al-Nusra, ahora denominado Frente Fath Al-Sham, utilizara aviones teledirigidos avanzados para localizar las posiciones del Ejército y observar el despliegue de tropas y filmar ataques suicidas.
Los grupos terroristas incluso lograron armar algunos drones con artefactos explosivos, algo comprobado el pasado 20 de abril, cuando se derribó en Homs un dron del Estado Islámico, Daesh, en árabe, que utilizaba bombas de la Organización del Tratado del Atlántico del Norte (OTAN) fabricadas en Bulgaria.
De igual forma, las Fuerzas Armadas sirias operan en la actualidad misiles termobáricos, lanzacohetes BM- 30 Smerch, el sistema pesado de lanzallamas TOS 1 A Solntsepick y asimilaron nuevas técnicas para las operaciones nocturnas de la aviación y de pequeñas y medianas unidades terrestres.
Para los blindados, entre ellos el tanque T-90 pero especialmente los del tipo T-62 M, se utiliza ahora el nuevo sistema óptico y electrónico Sarab 3 que genera y distorsiona la efectividad de los misiles guiados TOW-2, estadounidense, y cuyo uso incrementaron los grupos terroristas desde fines del 2016.
Al mismo tiempo, el Ejército sirio cuenta ahora con unidades como la Quinta Legión, conocida como Los cazadores del Daesh y especialmente entrenada con la asesoría de Rusia para operaciones en zonas de difícil acceso como el vasto desierto sirio.
A estos elementos se une una táctica de ataque sobre la base de pequeñas unidades terrestres con equipos de visión nocturna, dispositivos de puntería y el uso de ellos en armas como el fusil lanzagranadas AK-104, entre otros, y continuamente empleados por las tropas especiales subordinadas al general Suheil Al Hassan.
En apenas cinco años, la utilización y empleo efectivo de esas técnicas requirieron un rápido aprendizaje, al igual que las tareas que asumen los desminadores del Ejército sirio y las fuerzas de seguridad, operaciones y tropas especiales y de la Policía Militar, esta última de reciente creación.
Junto a estas especificaciones es de destacar la intensa preparación de combatientes voluntarios o de la Defensa Popular en regiones como Quneitra, la propia capital del país, Latakia, Homs, Alepo y Palmira, entre otras.
Al menos en cinco frentes de combate claramente definidos como en el norte de las provincias de Alepo, Hama, Homs, Latakia- fronteriza con Turquía- y al sur de Damasco, están empleándose además, equipamientos militares de última generación como nunca antes en la región del Medio Oriente. lam/pgh
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